El control de fugas es la comprobación de la estanqueidad de los circuitos que contienen gases fluorados y la búsqueda de las áreas o puntos de pérdida de fluidos de acuerdo al procedimiento establecido en el Reglamento (CE) nº 1516/2007, de 19 de diciembre de 2007. En este reglamento se establecen, de conformidad con el Reglamento (CE) nº 842/2006 del Parlamento Europeo y del Consejo, requisitos de control de fugas estándar para los equipos fijos de refrigeración, aires acondicionados y bombas de calor que contengan determinados gases fluorados de efecto invernadero en equipos de refrigeración.

¿Ya has hecho un control de fugas de tu aparato de aire acondicionado? Si estás en ese momento has de tener muy presente que tienes que recurrir a un profesional acreditado con certificación de manipulación de gases fluorados como el que poseen los profesionales de Klimia.  La instalación de equipos de refrigeración o climatización con sistemas frigoríficos, el mantenimiento o revisión, incluido el control de fugas, carga y recuperación de refrigerantes fluorados, la manipulación de contenedores de gas y el desmontaje deben ser realizadas precisamente por un profesional certificado. Además para realizar estas actividades deben de formar parte de una empresa habilitada para la manipulación de gases fluorados, como es el caso de Klimia.

Así lo recoge el Real Decreto 115/2017 sobre manipulación de Gases Fluorados, que entró en vigor hace un año y afecta sobre todo a los instaladores y distribuidores y comercializadores de equipos que utilizan gases fluorados, en definitiva, a los profesionales que de una manera u otra tienen relación con el aire acondicionado y/o la refrigeración.

Su importancia reside en que la mayor parte de fugas de CO2 al medio ambiente se produce en el ámbito doméstico. Y los equipos de aire acondicionado representan una parte importante del porcentaje de fugas, según informa CNI (Confederacion Nacional de Instaladores), por lo que la aplicación de este real decreto vela por controlar y reducir estas fugas.

Por este motivo, existe obligatoriedad para los particulares de controlar las fugas. Cuando un consumidor adquiere en un almacén, gran superficie o tienda, bien física u online, un equipo de aire acondicionado, debe de remitir al comercio en cuestión un justificante que demuestre que esa instalación ha sido realizada por un instalador y una empresa certificada para la manipulación de gases fluorados (con sus respectivos números de registro).

De esta manera, se consigue tener un control sobre las instalaciones de aire acondicionado domésticas y se garantiza la profesionalidad en la instalación de aire acondicionado.

La manipulación de gases fluorados por parte de empresas habilitadas y profesionales certificados no es nueva, ya aparecía en anteriores decretos, pero si es verdad que resultaba difícil controlar quién realizaba la instalación una vez se adquiría el equipo en grandes superficies o páginas web.

También se introducen multas del régimen sancionador previsto en la Ley 34/2007 de calidad del aire y de protección de la atmósfera, pueden llegar en estos casos a los 20.000 €, no sólo por no entregar los justificantes de la instalación, sino incluso por entregarlos más tarde de un año. Porque tal y como recuerda CNI, no conocer la norma no exime de tener que cumplirla, así que, es necesario conocer lo que dice la normativa sobre la instalación de aire acondicionado, recurrir siempre a instaladores profesionales y notificar la instalación al comercio donde se adquiera el equipo.

Esta normativa implica una serie de obligaciones con el principal objetivo de velar por la seguridad y profesionalidad en la manipulación de gases fluorados.

Para obtener el certificado de industria que acredite la capacidad de manipulación de gases fluorados, es necesario realizar algunas de las acciones formativas que dicta el Real Decreto 115/2017, de 1 de febrero.

El pasado año también se modificó el Real Decreto por el que se regula la comercialización y manipulación de gases fluorados y equipos basados en los mismos. Entre las principales novedades que regula este nuevo Real Decreto 115/2017, destacan:

  • Requisito de experiencia: en relación a la experiencia anterior a 2009 para poder acceder a los diferentes planes formativos, ya no se exige que dicha experiencia sea anterior a 2009.
  • Modificación del temario: introduciéndose la información sobre las tecnologías pertinentes para sustituir o reducir el uso de gases fluorados de efecto invernadero y la manera segura de manipularlas.
  • Duración: Ampliación del número de horas de los diferentes planes formativos.